El 10 de octubre se llevarán adelante las elecciones en la Unión de Trabajadores de la Educación –UTE- y como en cada elección donde existen competidores diversos, los porotos se cuentan como oro.

De cara a octubre, ambos sectores buscan afianzar sus estructuras para continuar al frente con un periodo más o bien ser la alternativa dé el batacazo.

Hace algunas horas, miembros de la lista opositora –Púrpura-Verde-Granate– presentaron una denuncia ante los medios ante la imposibilidad de incorporar al padrón electoral a casi 300 docentes y diferentes trabajadores. “La UTE les niega su derecho al voto”, dispararon a través de un comunicado de prensa.

Hubo movilizaciones desde la oposicion a la sede del gremio que actualmente conduce Angélica Graziano en reclamo “por la decisión de excluirlos del padrón electoral y atentar contra la democracia sindical”, expresaron.

“Existen 14 Espacios Educativos comunitarios en CABA, repartidos entre Bachilleratos Populares y Espacios de Primera Infancia, que pelean porque el Estado reconozca sus cargos y a principios de año comenzaron a aportar de manera voluntaria su cuota sindical para tener un respaldo gremial y fortalecer sus derechos laborales. Pero la UTE no los reconoce y, sin explicación alguna, los relega del derecho a elegir sus representantes en el sindicato”, es la premisa de la oposición.

Duelo de argumentos

En el medio: cada uno tiene su motivo. La lista Púrpura-Verde-Granate, integrante de la Corriente de les Trabajadores de la Educación –CTE- se escuda en la ley de Asociaciones Sindicales donde expresa que los afiliados pueden votar teniendo seis meses en la actividad, hecho que según la CTE “cumplen con creces los 278 educadores que reclaman su ilegítima exclusión para poder participar en la elección del próximo 10 de octubre”.

Aun así, UTE se mantiene firme en su postura y –al menos hasta el martes- la decision es de no ceder espacio en el reconocimiento de los afiliados recientes ya que estos no cumplen con el plazo afiliatorio para poder ser considerados votantes.

¿Por qué? Porque según expresaron desde el oficialismo, el artículo 64 del estatuto gremial de UTE indica que solo podrán incluirse en el padrón aquellos docentes que se hayan afiliado al sindicato hasta el 31 de marzo de 2023, y que aquellos que hoy reclaman sufragar lo hicieron “mucho después”, como le dijeron a Sonido Gremial desde el oficialismo. “Tienen todo el derecho a votar, pero no en esta elección porque no cumplen con los requisitos del estatuto de UTE”, sentenciaron desde el espacio gobernante.