Así lo afirmó el secretario general de ATE y la CTA Autónoma bonaerense, Oscar de Isasi, a horas de que comience una nueva etapa en la discusión salarial para los estatales de la Ley 10.430 y teniendo en cuenta como viene la discusión con los docentes.
La reunión está pautada para las 17 hs. de este martes 3 de abril y concurrirán todos los gremios con representación en las distintas áreas de la administración central, auxiliares de la educación, niñez y enfermeros, entre otros.
“Si hoy hay paritarias abiertas es fruto de la lucha de los trabajadores y trabajadoras del Estado, con especial relevancia en los paros de los días 5 y 6 de marzo con movilización a la Gobernación. Esto sumado a la última carpa montada en la Plaza San Martín en unidad con otros gremios estatales, fue determinante para que el gobierno tenga que abrir la paritaria”, explicó el dirigente.
“Surge como imposición de la lucha, más que como convicción del gobierno. La verdad es que si hubiera una oferta salarial sustancialmente diferente a la ofrecida a los docentes, entraría en la categoría de milagro”, sintetizó.
Al explicar cuáles son las condiciones para un acuerdo, dijo: “Cualquier oferta que merezca ser atendida tendría que recomponer el poder adquisitivo perdido, tendría que empatarle a la inflación 2018 y tendría que tener políticas activas que nos permita avanzar en un proceso en el que el salario mínimo este en el mismo nivel que la canasta mínima de consumo. Estos tres ejes son centrales para poder estar en una negociación seria”.
En cuanto a la pérdida de poder adquisitivo que los estatales arrastran de años, señaló que: “En el año 2016, los estatales bonaerenses hemos perdido no menos de un 7% en relación a la inflación, si comparamos diciembre con diciembre. Si tomamos el periodo agosto 2015 hasta diciembre 2016, la pérdida es de un 11%, que son los meses donde se aplicaron aumentos . En 2017 hubo clausula gatillo tardía que solo empató la inflación de ese año, sin contemplar la pérdida del año anterior, por esto la rechazamos rotundamente. Este año, cualquier aumento debería contemplar la pérdida de 2016.
“Si el gobierno insiste en un aumento del 15%, nuestra organización lo va a rechazar categóricamente porque no contempla la proyección inflacionaria de la mayoría de los economistas que la proyectan en un 20%”.
Otro de los temas que no convence a los representantes de ATE bonaerense es la posibilidad que el gobierno se comprometa en un monitoreo de la inflación y de los salarios. “Si plantean un monitoreo de los salarios también lo vamos a rechazar porque cuando lo acordaron con los docentes no lo aplicaron nunca y, además, porque no significa una actualización acorde a la inflación”.
Por otra parte, de Isasi anunció que, “a la paritaria salarial vamos a ir con otros temas centrales que no los podemos abordar en otros ámbitos ya que no existen. Vamos a pedir que se acelere el pase a planta permanente de los más de 15 mil precarizados del Estado provincial, la reincorporación de los trabajadores y trabajadoras de la UEP, del Registro de las Personas y de distintos organismos, además del fin de los despidos. La intervención provincial en la reapertura y reincorporación de los compañeros y compañeras de FANAZUL. A su vez, que se descongelen las vacantes para la designación de personal en las áreas críticas. Vamos a plantear todo rechazo al intento de armonización de las Cajas jubilatorias y el pedido de la normalización de las prestaciones del IOMA”.
Para finalizar, exigió la apertura de las paritarias de los profesionales de la salud y de los judiciales y Ratificó el paro con movililzación del 5 de abril
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