Un capítulo más en la saga interminable de las empresas de seguridad privada que intentan aplastar la participación gremial de los trabajadores.  Luego de que Comahue y Líderes contrataran a Florencia Arietto para perseguir y armar causas judiciales contra el Bloque Nacional que dirigen el moyanista Christian López y el barrionuevista Leónidas Requelme, y del fracaso rotundo de la abogada anti obrera quien recibió un duro revés en la justicia, el sector empresario decidió erradicar "el problema" de raíz y despedir   a delegados, afiliados y miembros de la Comisión Directiva del Bloque que prestaban servicios en sus empresas. Luego de un intenso entrecruce de cartas documentos, el anuncio de inminentes medidas gremiales en los principales clientes de las empresas en cuestión y gracias a la enorme presión judicial y política de la organización gremial de los vigiladores y sus abogados, se logró que los empresarios se rectifiquen de los despidos y tengan que reincorporar a los trabajadores cesanteados. 

Con esta acción, el sector patronal obstinado en perseguir la organización gremial de los trabajadores del Bloque, ya suma 4 derrotas en cuestión de meses: primero fue la orden judicial de reinstalar a un delegado despedido, luego la ratificación del fallo apelado por los empresarios, la sentencia judicial a favor del Bloque Nacional que desestimaba la denuncia patrocinada por Arietto sobre la comisión de delitos en la medida gremial  en el hall de la estación Retiro de trenes, y ahora, la reincorporación de los compañeros despedidos. “Sin dudas, con este batacazo, el Bloque Nacional reafirma su postura inamovible en defensa de los derechos de los trabajadores y su legitimidad absoluta como organización sindical que llegó a la actividad para refundar a la seguridad privada” expresaron desde el armado de unidad de López y Requelme.  

En ese sentido, la organización gremial publicó un comunicado de prensa diciendo que los empresarios “no aprenden, siguen obstinadamente luchando contra molinos de viento con una demencia quijotezca, emperrados en erradicar la organización gremial de los trabajadores.” Y prosigue: “Los empresarios, acostumbrados por 40 años a manipular como marioneta a un dirigente como Ángel García, se han dado la cabeza una vez más con un bloque de concreto: el Bloque Nacional. Empresas como Líderes y Comahue, quienes este último tiempo han intentado todo por desactivar a esta organización gremial, invirtiendo sumas exorbitantes de dinero en el caché de una abogada mediática y anti obrera como Florencia Arietto, una vez más tuvieron que recular. Hoy nos complace con un orgullo inmenso informar que han tenido que reincorporar a los afiliados, delegados y miembros de la Comisión Directiva despedidos. A paso firme, avanzamos cada vez más con hechos contundentes, con la convicción de refundar la seguridad privada.  No vamos a parar hasta ver a nuestra actividad dignificada y engrandecida como nos merecemos.” Y enfatiza al final: “El tiempo de los empresarios y sindicalistas que se enriquecieron a costa de entregar los derechos de los trabajadores llegó a su fin.”