La bebé de cuatro meses, estuvo hasta hace unos días, ocho semanas internadas en el "Eva Perón". Sigue con internación domiciliaria en Los Altos y necesita de una atención de pediatra o enfermera las 24 horas.
Luego de dos meses de estar internada en el Hospital de Niños "Eva Perón", la pequeña de cuatro meses Aurora Ayelen Arroyo finalmente consiguió la internación domiciliaria. La familia, oriunda de Los Altos, aunque satisfecha con el regreso al hogar, se sigue mostrando molestar por la falta de respuesta de la obra social a los requerimientos puntuales que debe tener para con la bebé. Por eso María Belén Ahumada, mamá de la niña, sostiene un fuerte pedido con OSECAC en procura de lograr una mejor calidad de vida para la menor de cuatro años.
Aurora padece holoprosencefalia alobar, insuficiencia respiratoria y demás complicaciones que ya la hacen paciente electrodependiente. Por eso sus padres solicitan que la obra social asista adecuadamente con los artefactos necesarios a su hija.
"Ya se le realizó el pedido a la obra social con todo lo que mi nena necesita, aparatos respiratorios, oxímetro, aspirador, tubos de oxígeno pero nos dieron lo que quisieron. El oxímetro vino sin los sensores y nos trajeron un nebulizador en vez de humificador, que es lo que ella necesita por su traqueotomía y para que no se le tape la cánula", comentó María Belén en diálogo con La Unión. A esto se añade y por pedido expreso de los médicos que la atendieron en el nosocomio capitalino, que tenga un pediatra o enfermera con atención las 24 horas. “Esa es nuestra lucha pero por cuestiones burocráticas hasta ahora no conseguimos la atención médica con las condiciones que nos pidieron en el Hospital de Niños. Ella necesita un médico que registre su condición, además de una rehabilitación con Kinesiólogo, porque debido a su traqueotomía, se junta moquito y eso debe ser atendido, lo mismo que una neuroreahibilitación y la fonoaudiología. Todo esto está pedido en el historia clínica”, detalló.
“No es fácil tener una internación domiciliaria cuando está faltando tantas cosas que son vitales para mi hija”, sentenció con preocupación María Belén. A pesar de la falta de respuesta de la obra social, los papás de Aurora, además de no bajar los brazos, son agradecidos por el apoyo recibido y el efecto y atención que reciben de todos, en especial de su pueblo de Los Altos. “Aurorita ha tocado el corazón de muchos”, finalizó.
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