El Departamento de Estudios Estadísticos de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT) publicó los datos provisorios con la información obtenida durante el cuarto trimestre del año pasado respecto a accidentes laborales. Según las conclusiones del estudio, la accidentabilidad laboral en 2021 bajó respecto del inicio de la pandemia, lo mismo que los fallecimientos.

Los datos provisorios muestran que en 2021 se notificaron un total de 489.925 casos de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales, determinando un descenso del 12,2 por ciento en la accidentabilidad laboral respecto de 2019.

En el 98,2 por ciento de los casos se trata de personas trabajadoras de unidades productivas, mientras que el 1,8 por ciento restante involucra a personal de casas particulares.

Durante este período se registraron 106.672 accidentes in itinere, 15,8 por ciento menos que en 2019, en tanto que aquellos accidentes y enfermedades profesionales que ocasionaron días de baja laboral alcanzaron los 314.350 casos, lo que marcó una disminución del 11,3% respecto de los reportados en 2019.

Bajan las muertes

Por su parte, el total de casos mortales alcanzó los 564 fallecimientos: 314 ocurrieron en el lugar y en ocasión del trabajo y 250 sucedieron en el trayecto.

En cada caso implicó un descenso de la mortalidad por causas laborales: la mortalidad laboral general disminuyó un 3,3 por ciento, la mortalidad por accidentes in itinere un 4,2 por ciento y la mortalidad por accidentes de trabajo y enfermedades profesionales – en ocasión del trabajo – un 2,5 por ciento.

Así lo indicó el Informe Provisorio de Accidentabilidad Laboral de 2021 de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo.

El Departamento de Estudios Estadísticos de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT) publicó los datos provisorios con la información obtenida durante el cuarto trimestre del año pasado respecto a accidentes laborales. Según las conclusiones del estudio, la accidentabilidad laboral en 2021 bajó respecto del inicio de la pandemia, lo mismo que los fallecimientos.

Los datos provisorios muestran que en 2021 se notificaron un total de 489.925 casos de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales, determinando un descenso del 12,2 por ciento en la accidentabilidad laboral respecto de 2019.

En el 98,2 por ciento de los casos se trata de personas trabajadoras de unidades productivas, mientras que el 1,8 por ciento restante involucra a personal de casas particulares.

Durante este período se registraron 106.672 accidentes in itinere, 15,8 por ciento menos que en 2019, en tanto que aquellos accidentes y enfermedades profesionales que ocasionaron días de baja laboral alcanzaron los 314.350 casos, lo que marcó una disminución del 11,3% respecto de los reportados en 2019.

Bajan las muertes

Por su parte, el total de casos mortales alcanzó los 564 fallecimientos: 314 ocurrieron en el lugar y en ocasión del trabajo y 250 sucedieron en el trayecto.

En cada caso implicó un descenso de la mortalidad por causas laborales: la mortalidad laboral general disminuyó un 3,3 por ciento, la mortalidad por accidentes in itinere un 4,2 por ciento y la mortalidad por accidentes de trabajo y enfermedades profesionales – en ocasión del trabajo – un 2,5 por ciento.

El reporte aclaró que «por tratarse de una situación extraordinaria y para mantener la comparabilidad histórica, se excluyen de las estadísticas los casos notificados de enfermedad profesional no listada Covid-19, consignándose el total de casos registrado durante el periodo considerado».

Malos ejemplos

Los accidentes y muertes por accidentes laborales son un drama que en los últimos años generó muchas críticas en el país, por el aumento de los índices, que hoy están en baja. Pese a esto, todos los días se producen este tipo de incidentes.

El fin de semana pasado, por ejemplo, dos obreras de la empresa AESA, que presta servicios para YPF en el yacimiento de Loma Campana, sufrieron importantes accidentes causándoles graves lesiones.

Las obreras son Carmen Rivas, de 38 años, quien recibió quemaduras en las vías aéreas por inhalación de gas. Su compañera, Melanie Sot de 22 años, sufrió lesiones en los antebrazos. La noticia del accidente fue pública recién el domingo al mediodía

Los accidentes laborales en la industria energética son recurrentes, afirman los gremios. El sustento es «la enorme flexibilización laboral y la superexplotación que se expresa en los récords de producción con menor cantidad de trabajadores en las dotaciones o equipos». Es una consecuencia directa de la adenda (reforma) al convenio colectivo de trabajo en el año 2017.

En el marco de este accidente, los sindicatos petroleros se reunieron esta semana en Neuquén, y buscaron una propuesta alternativa. La dirección de petroleros hizo asambleas en la cuenca hidrocarburífera de la región como una respuesta a la indignación que recorre en los yacimientos.

Se trata, de igual forma, de una maniobra del sindicato quien fue firmante de la adenda y acaba de cerrar una paritaria a la baja.