El secretario general del Sindicato de Trabajadores Municipales de Avellaneda (STMA), Hernán Doval, cargó nuevamente contra el intendente Jorge Ferraresi, luego del 30% de aumento otorgado a los municipales por un acuerdo con los gremios de UPCN, SUMA y AMRA. Es que para el STMA, dicha reunión fue “una farsa”.

“Eso es una desvirtuación de la paritaria porque en vez de ser una paritaria que se divide en partes iguales de cinco contra cinco, es una mesa en del Intendente con los sindicatos que inventó él y que además están denunciados de conseguir afiliados por los aprietes y las extorsiones de la Dirección de Personal a nosotros. Es una mesa donde no se puede discutir de igual a igual”, sostuvo Doval en diálogo con Info Región.

Reunión. El titular del STMA, gremio que no participó del encuentro, marcó además que “el día anterior hubo una reunión convocada por el Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires, que es el verdadero órgano de aplicación de la ley, y el Municipio mandó nada más que un abogado a tomar vista”.

“El Ministerio fijó una nueva reunión para el jueves que viene y por eso el Municipio se apuró a cerrar esa cuestión con los otros gremios que no están legalmente habilitados a sentarse a discutir paritarias”, planteó.

Aseguró, asimismo, que “la irregularidad acá es que el único gremio que tiene la personería gremial para sentarse a discutir paritarias es el STMA, y por esto mismo el Ministerio el año pasado tomó cartas en el asunto, porque vio que el Intendente no podía garantizar la realización de la paritaria de manera legal en Avellaneda”.

“Obviamente que vamos a concurrir a la reunión paritaria del jueves porque somos totalmente legalistas y el órgano de aplicación que marca la ley es el Ministerio de Trabajo, pero el Intendente nuevamente va a dejar las sillas vacías ya que no tiene intenciones de cumplir la ley”, disparó.

Aumento. En cuanto al acuerdo alcanzado, Doval señaló que “duró dos minutos la discusión salarial, el Intendente informó cuanto iba a dar y sus sindicatos lo firmaron, sin defender bajo ningún punto de vista los intereses de los municipales”.

Con respecto a la cifra, apuntó que “lo que se consiguió son tres cuotas de 400 pesos, aunque se lo quiera disfrazar de un 30 por ciento”.

“Venimos denunciando hace tiempo que en Avellaneda el salario básico está congelado en 5 mil pesos y está por debajo del nivel de indigencia, ni siquiera del de pobreza”, cuestionó Doval.

“Necesitamos que si el trabajador cobra en total, con horas extras, 10 mil pesos; que el sueldo básico esté en 10 mil pesos, porque eso también determina que se le aumente el sueldo a nuestros jubilados”, reclamó.