El líder camionero apoyó en las elecciones internas al sector disidente que impulsó la protesta. Acusaciones cruzadas.
El personal de más de 52 líneas de colectivos porteñas y bonaerenses no prestó este martes servicios durante 24 horas en reclamo de mejores salarios y condiciones laborales. Pero el paro es resultado de una dura interna por la conducción de la Unión Tranviarios Automotor (UTA). El gremio es conducido por Roberto Fernández, que en diciembre terminó atrincherado en la sede de su sindicato, en la Ciudad de Buenos Aires, cuando un grupo disidente, con Miguel Bustinduy a la cabeza, ingresó por la fuerza al edificio. Bustinduy recibió el apoyo de Hugo Moyano -el líder camionero- en las elecciones internas del gremio, tal como lo contó en PERFIL el periodista Aurelio Tomás. El dirigente camionero apoyó a Bustinduy, el candidato de la Lista Azul que buscó terminar con la hegemonía de Fernández en este gremio estratégico, clave a la hora de definir el impacto de un paro nacional. Los delegados de la empresa DOTA, que fueron los que impulsaron la protesta, eran una parte clave de la citada lista opositora. Si bien hace dos meses, ante la consulta de PERFIL, cerca del líder de Camioneros confirmaron el apoyo al sector opositor, negaron de manera terminante haber impulsado la toma de la UTA. "Fernández no puede manejar su gremio, nosotros no tenemos nada que ver", insistieron. Pero uno de los orígenes de esta interna podría surgir de que la UTA se había desmarcado de la avanzada de Moyano contra el ministro de Transporte, Mario Meoni, por el reclamo para que un hombre de su confianza -y con experiencia en el sector-, Guillermo López del Punta, fuera elegido como viceministro. Del lado de Fernández sostienen, en cambio, que los delegados de DOTA están bancados por Moyano y que reaccionan con la protesta (y la toma en su momento) porque están perdiendo terreno. Toma violenta de la UTA: un sector cercano a Moyano, detrás de los incidentes Lo cierto es que la medida de fuerza fue cuestionada por las autoridades nacionales que la calificaron de "ilegítima" y advirtieron que generará sanciones, mientras que la dirigencia de la UTA directamente la tildó de "ilegal". Y llega un día después de que la conducción oficial, bajo la órbita de Roberto Fernández, firmara la paritaria con una recomposición del 18,3 por ciento. Las 10 líneas principales afectadas por la huelga movilizan a unas 15 millones de personas al mes, en tanto más del 5 por ciento de la población de Buenos Aires está afectada por la protesta gremial, es decir, más de 698 mil usuarios de esos servicios. La líneas del área metropolitana paralizadas por los trabajadores que responden a la oposición que lidera Bustinduy son la 5, 6, 7, 8, 9, 10, 20, 21, 23, 24, 25, 28, 31, 44, 50, 51, 56, 57, 74, 76, 79, 84, 91, 99, 101, 106, 107, 108, 117, 130, 135, 146, 150, 161, 164, 168, 177 y 188 y, en el ámbito provincial, la 256, 263, 271, 299, 370, 373, 384, 385, 388, 403, 405, 421, 429, 435, 540 y 543, confirmaron las fuentes gremiales. El ministro Meoni, calificó hoy a la medida de fuerza que protagonizan los choferes de las líneas de la empresa DOTA como "ilegítima en términos legales" y explicó que "la UTA y el conflicto no se relaciona con las cuestiones salariales sino con temas internos, sobre los que trabaja la cartera laboral". La Comisión Nacional de Regulación de Transporte (CNRT) aseguró que "se adoptarán medidas sancionatorias" sobre las firmas que no ofrecieron hoy servicio de pasajeros -aunque no explicó de qué tipo- y afirmó en un comunicado que la convocatoria a una protesta por parte de "un grupo de trabajadores fue arbitraria e injustificada". Conflicto en la UTA: intentaron tomar la sede del gremio en Mar del Plata y fueron desalojados Roberto Fernández rechazó el paro convocado por la agrupación "Juan Manuel Palacios" y aseguró que "gerentes de la firma monopólica DOTA quieren conducir a la organización gremial a través de pseudodirigentes", en referencia a Bustinduy. Asimismo, señaló que la protesta "es ilegal porque la UTA no dispuso ningún paro". El sindicalista reseñó que "ese grupo fue el que tomó la sede central del gremio el 16 de diciembre último de forma violenta y arriesgó la vida de los empleados" y negó que la oposición haya paralizado hoy más de 52 líneas al puntualizar que "dieciséis funcionan normalmente porque no se sumaron y, otras 25, no permiten salir a las unidades". "DOTA es responsable y algunos de sus gerentes cómplices. Esa empresa tiene varias líneas, es dueña de la fábrica de chasis Agrale, tiene mutual y compañía de seguros, pero le hace falta la UTA para culminar con el combo", denunció el dirigente. Además,aseveró que "el paro es contrario a la ley y pone en riesgo centenares de puestos de trabajo". Anoche, Fernández se adelantó a la reunión paritaria prevista para este mediodía y convino un acuerdo de recomposición de los haberes del 18,3 por ciento en tres tramos, aunque la oposición a su gestión ratificó de todas formas la medida de fuerza de hoy. El sindicato, las carteras laboral y de Transporte y las cámaras empresarias convinieron el pago de las diferencias salariales derivadas de la determinación de los salarios de enero para este viernes, en tanto esas diferencias de haberes de diciembre serán abonadas en dos cuotas iguales el 26 de febrero y el 30 de marzo, ratificó el dirigente. Además, el primer aumento mínimo y uniforme derivado del decreto 14/20 será efectivizado el 17 de febrero, el segundo el 17 de marzo y, el correspondiente a ese último mes, el 17 de abril próximo, todo lo cual totalizó una mejora del 18,3 por ciento.
Comentá la nota