Asamblea de empleados en el Palacio y mensajes a Lorenzetti activaron también que jueces se plegaran a la protesta.
Una postal inusual ayer dominó la planta baja del Palacio de Tribunales. Una multitudinaria asamblea alteró el ritmo del epicentro de la actividad del Poder Judicial con el doble objetivo de expresar malestar contra las últimas medidas adoptadas por el Gobierno nacional (respecto del traspaso de algunos tribunales a la órbita de la Ciudad de Buenos Aires y por la intención de recortar la feria), y de enviar un mensaje al presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, para que fije posición institucional a lo que consideran un ataque del Ejecutivo.
Pero más inusual aún fue la respuesta de los propios magistrados que, tras el cónclave anticipado por Ámbito Financiero, resolvieron también ellos suspender sus tareas y concentrarse en ese mismo lugar mañana, en lo que se anticipa como un paro total de actividades de la Justicia en todo el país. El detalle que no pasa inadvertido es que la medida fue impulsada por los gremios, pero ahora son los propios jueces y fiscales los que pasaron al frente a motorizarla, algo sin precedentes.
A través de un comunicado, la poderosa Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia nacional (AMFJN) dio su grito de guerra (ahora sí explícito) ante la serie de convenios firmados entre el presidente Mauricio Macri y el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, para traspasar algunos juzgados vacantes de la Justicia penal ordinaria. Así, la AMFJN convocó a magistrados, secretarios y funcionarios de todo el Poder Judicial y de los Ministerios Públicos de la Nación (fiscalías y defensorías) a una reunión en la planta baja del Palacio de Justicia, con suspensión de tareas, para el viernes a las 12.30.
Ese mismo día, el gremio de judiciales que lidera Julio Piumato había convocado a un paro sin concurrencia a los despachos. Ayer la asamblea del fuero penal que citó el Frente Azul Bermellón votó masivamente la adhesión y la invitación a que los jueces expresaran su posición a través de la AMFJN. No hizo falta esperar mucho; por la tarde, los magistrados hicieron un duro pronunciamiento.
"Esta asociación reitera su más enfático rechazo a esa decisión -la de la transferencia del fuero penal- que viola la Constitución nacional y vulnera derechos laborales adquiridos por secretarios, funcionarios y empleados", afirmaron.
Convocatoria
Allí no sólo exhortaron al personal que quedaba por fuera del paro de trabajadores convocado por Piumato y al que suscribió también el gremio Sitraju nacional con su propio llamado a parar, sino a los tres consejeros jueces del Consejo de la Magistratura, a los jueces de Comodoro Py y a todos los magistrados del interior para que también amplifiquen la medida.
Sin antecedentes, fue un llamado de atención al Ejecutivo, que estimaba que con los convenios firmados, la resistencia se iba a ir debilitando con el plus de que su firma fue planeada en medio de la feria.
Sólo Sitraju Capital Federal -que posee gran cantidad de afiliados en la Ciudad- es la única que no apoya el paro porque apoya la transferencia, incluso con proyecto propio. El próximo paso de la guerra, anticipan por lo bajo los magistrados, podría darse directamente con la materia prima con la que trabajan: los fallos.
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