El titular de Udocba, Miguel Díaz, se distanció de las 62 Organizaciones y pidió unidad para enfrentar la reforma laboral. “Le pedí por favor que vuelva a convocar al MTA para que se vuelva a encausar la dirigencia sindical”, explicó.
El titular del gremio docente bonaerense UDOCBA, Miguel Díaz, que hasta hace poco formaba parte de las 62 organizaciones que lideraba Gerónimo “Momo” Venegas, se distanció contra el nuevo titular de la UATRE, Ramón Ayala, se despachó contra el gobierno y contra algunos sectores del peronismo, aunque pidió la unidad de la oposición.
En diálogo con el programa Mal Aconsejados de Radio Caput, el dirigente docente opinó que “hay un clima en contra de los trabajadores desde el gobierno nacional, y lo demuestran todos los días“, y agregó que con la reforma laboral que impulsa el gobierno “es impensable que los compañeros tengan una indemnización con el mínimo vital y móvil, que se acaben de alguna manera las vacaciones, que se acaben las condiciones laborales y familiares de una personas, que una persona no sepa cuantas horas va a trabajar por día”.
“Nadie puede enamorarse de su verdugo, y esta ley es el verdugo de los trabajadores“, señaló, y criticó al líder de la UATRE, Ramón Ayala: “Salió a decir primero que la 62 acompañaban, y después tuvo que decir ‘UATRE acompaña’. Eso fue un error estratégico: No haber hablado con sus compañeros”.
Además, el sindicalista que fue miembro fundador del MTA con Hugo Moyano y otros dirigentes en los 90´s, contó que en las últimas horas le pidió al camionero que vuelva a convocar a ese espacio gremial “para que se vuelva a encausar la dirigencia gremial”. “Hay que volver a las raices, que están siempre en el mismo lugar, en la conformación de un frente sindical que convoque a todos los que tenga buena voluntad y que sean buenas personas”.
Sobre el peronismo dijo que “los intendentes, algunos senadores provinciales y algunos gobernadores, los que han ganado, los que realmente representan a la gente, tienen que juntarse“.
En el mismo sentido, reivindicó la figura de Cristina Fernández, aunque no la ve como protagonista de cara a lo que se viene: “Tiene que haber una etapa superadora. Cristina, a la que yo no he combatido nunca, pero tampoco ha sido mi líder, creo que ha cumplido una etapa importante para Argentina. Es una gran dirigente, pero creo que ahora no esta a la altura de las circunstancias“.
“Los votos de Unidad Ciudadana dependen de esos intendentes que han puesto sangre sudor y lágrimas, y no de algunos diputados que tuvieron que esconderlos para la campaña porque eran piantavotos. Por ejemplo Scioli, una vergüenza nacional“, tiró.
También criticó a los gremialistas que ceden ante el gobierno por temor a ser encarcelados: “Puede ser que algunos dirigentes que están con el culo sucio quieran resignar los derechos de la gente por su problema. Si hay personas que han hecho daño, que han robado, tienen que ir en cana, como cualquier hijo de vecino”.
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