El Secretario Adjunto de la CTA Autónoma, Ricardo Peidro, se reunió con dirigentes de las diferentes seccionales de todo el país que adhirieron a la creación de la CTA Perón, para encarar el primer paro que se organice desde el nacimiento de la nueva central, disidente a la conducción de Pablo Michelli.

El titular de los Visitadores Médicos junto a Adolfo Aguirre (Sec. Relaciones Internacionales), Luis Tiscornia (CONADUH), Carolina Ocar (Secretaria de Comunicación), “Cachorro” Godoy (Secretario Nacional de ATE) y otros dirigentes del resto del país, debatieron sobre la realidad actual y aunaron criterios para concluir en la decisión de reunirse el próximo 7 de febrero para lo que sería el lanzamiento del primer paro nacional como organización disidente a la conducción de Pablo Micheli. “Vamos a convocar a los trabajadores estatales y privados que no están organizados en la CTA Autónoma para hacer frente común al ajuste y la entrega”, anunció Peidro.

Entre los temas que se abordaron, fueron primordiales los relacionados a las paritarias y la intención del Gobierno de limitar su negociación fijando un techo del 18%. Por otro lado, la intención de la CTA Perón es “repudiar todos los intentos de flexibilización laboral y seguir bregando por las fuentes de trabajo”. “Tenemos que seguir dando la pelea por la reincorporación de los trabajadores y trabajadoras despedidas”, destacó el dirigente de la Avenida Avellaneda (sede central de la AAPM).

Durante la reunión, se cuestionó fuertemente “la direccionalidad que intenta dar el Gobierno nacional en materia de derechos humanos: poniendo en duda el genocidio, la cantidad de compañeros y compañeras desaparecidas, intentando criminalizar la niñez y condenando a los jubilados a situaciones de mayor vulnerabilidad”. “En este sentido, se ratificó la línea histórica de la CTA en defensa de los derechos de los pibes y pibas –fundamentalmente contra la baja en la edad de imputabilidad-, de los jubilados en la lucha por el 82% móvil y la convocatoria de una reunión nacional de mujeres de la CTA-A de cara al 8 de marzo”, anunciaron.

“Creemos que estas iniciativas van en dirección de fortalecer la unidad de la clase trabajadora, que es un valor estratégico para nuestra Central. Es la unidad en la lucha, propiciando el debate fraterno, donde los compañeros se sientan parte, estableciendo consensos y convocando a otros compañeros, siempre desde la pelea, consecuentes con nuestros principios de autonomía, libertad y democracia sindical, que es como vamos a construir la CTA que necesitamos”, concluyó.