Los trabajadores petroleros de la Patagonia firmaron la "paz social" con las empresas a cambio de adelantar un mes una cuota del 9% del incremento salarial y de que no haya despidos al menos hasta finalizar febrero.
En el transcurso de esos dos meses, las empresas continuarán el diálogo con el Gobierno nacional y las provincias que integran la Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos (OFEPHI) para trazar las políticas de mediano y largo plazo para el sector.
Las empresas se comprometieron a no efectuar despidos, principalmente en el megayacimiento no convencional de Vaca Muerta hasta el 28 de enero, día en el que habrá una nueva reunión para analizar los pasos a seguir.
En ese contexto, el Sindicato de Petroleros y Gas Privado, que conduce Guillermo Pereyra, el Sindicato de Petroleros Jerárquicos de Neuquén, Río Negro y la Pampa, que lidera Manuel Arévalo, firmaron un acuerdo con las cámaras del sector.
Por el sector empresarial firmaron representantes de la Cámara de Empresas Productoras de Hidrocarburos (CEPH) y la Cámara de Empresas de Operaciones Especiales (CEOPE) que en Neuquén tienen a cargo las operadoras y empresas de servicios con injerencia en Vaca Muerta.
En la paritaria firmada en mayo pasado se había acordado que el último tramo de incrementos sería con los haberes de febrero de 2020, pero el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, convenció a las partes de anticipar la cuota para sellar la paz social.
En el acta del entendimiento se fijó nueva audiencia entre las partes para marzo, en la que continuará analizando el impacto de índices de la economía en los salarios de trabajadores del sector, informó el gremio de Pereyra en un comunicado de prensa.
En el mismo, se indicó que las partes se comprometieron a "mantener la actividad en un marco imprescindible de paz social y ausencia de conflicto que permita recuperar el nivel de trabajo de meses anteriores"
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