Desde la empresa explicaron que esta medida responde a la necesidad de "asegurar la continuidad del resto de nuestras operaciones y mejorar la competitividad de nuestros clientes en el mercado local y regional de TDI". La planta de Río Tercero, que era la única en Argentina y América Latina en producir este insumo utilizado en la industria colchonera y automotriz, se enfrenta a un escenario complejo debido a una sobreoferta de TDI a nivel mundial, lo cual ha reducido drásticamente los precios internacionales.

"Petroquímica dejará de producir TDI para convertirse en un proveedor integral de soluciones de la industria de la espuma", señalaron desde la compañía, destacando que la transformación de su modelo de negocio busca adaptarse a los cambios en el mercado global. Sin embargo, el impacto en la región será significativo, ya que la planta era el principal cliente de la Fábrica Militar de Río Tercero, que le suministraba ácido nítrico.

Los 125 trabajadores despedidos, que representan un tercio de la fuerza laboral de la empresa, serán indemnizados. En tanto, Petroquímica Río Tercero continuará con la producción de otros productos químicos y de PAC (Policloruro de aluminio para el tratamiento de aguas), "con total normalidad", según indicaron desde la firma.

Este cierre marca un golpe fuerte para la comunidad de Río Tercero, donde la petroquímica es una de las principales fuentes de empleo. Los operarios despedidos expresaron su preocupación por el futuro laboral en la región, mientras los sindicatos locales ya han comenzado a analizar posibles medidas para defender los derechos de los trabajadores afectados por esta medida de ajuste.