Luján Berardi

Este miércoles, los gremios de aeronavegantes se reunieron para decidir los planes a seguir. La asamblea tuvo como fin determinar las acciones que tomarían los sindicatos en el contexto de la puja salarial que llevan adelante con Aerolíneas Argentinas (AA). En este nuevo encuentro, anunciaron un paro por 24 horas que se extenderá desde el mediodía de este viernes 13 hasta el mediodía del sábado 14 y afectará a todos los vuelos de la compañía de bandera.

Esta medida de fuerza dejará otra vez a los pasajeros rehenes del reclamo sindical, y, según los cálculos de AA, podría afectar entre 27.000 a 30.000 pasajeros. A su vez, calculan que el paro, del que participará la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) en conjunto con la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), impactará en cerca de 250 y 300 vuelos que entren o salgan de todos los aeropuertos, ya que será un paro total de actividades.

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La Unión del Personal Superior y Profesional de Empresas Aerocomerciales (UPSA) y la Asociación del Personal Aeronáutico (APA) realizarán, por su lado, asambleas en los lugares de trabajo también el viernes, lo que podría, a su vez, afectar el servicio de Intercargo, quienes ya sorprendieron a los pasajeros durante la tarde del martes con asambleas escalonadas y el perjuicio de al menos doce vuelos en varios aeropuertos del país.

Juan Pablo Brey, secretario de Aeronavegantes, compartió un audio en el que explicó la situación del día: “No hemos recibido ningún llamado, ninguna comunicación por parte del Gobierno, por lo tanto entendemos que nos están empujando a esta situación para forzar el objetivo que tienen hace tiempo, que es la privatización de Aerolíneas Argentinas. Nosotros estamos ya al día de hoy un 75% con los sueldos desfasados con respecto a la inflación, y hemos pedido el 25% como para firmar y seguir negociando, y nunca nos han contestado y no nos han llamado de parte del Gobierno durante meses”.

Por su parte, fuentes de Aerolíneas Argentinas comentaron ante la consulta de este medio que, frente a la noticia, todavía deben decidir cómo van a responder: “No está definida la medida paliativa a tomar. Es muy prematuro. Un paro de 24 horas es difícil de reprogramar, correr vuelos, etc. Calculo que, en primer lugar, se va avisar a los pasajeros, como ya se hizo, que cambien el día de los pasajes con anticipación”.

Pasajeros varados en el Aeroparque el viernes pasado por la suspensión de varios vuelos durante una de las medidas gremialesTadeo Bourbon - LA NACION

No habrá penalidades para quienes tengan tickets para volar por la compañía de bandera entre el viernes y el sábado de esta semana y decidan modificar la fecha, como aclaró la empresa luego de las nueve horas de medida de fuerza del viernes pasado, que paralizó las salidas desde Ezeiza y Aeroparque, y afectó a 16.000 pasajeros de 185 vuelos.

Ante la escalada del conflicto entre los sindicatos y la compañía aérea, luego de diversos intentos fallidos por acordar un aumento salarial para los trabajadores de este sector, los gremialistas intensificaran su posición. Por esto, Aerolíneas aseguró que quienes cambien los pasajes tendrán una ventana para hacerlo de15 días sin penalidades desde la fecha del paro.

Para realizar este cambio, contaron, los pasajeros deberán ingresar a la página web o a través de la agencia en la que compraron. En el primer caso, tendrán que registrar el código de reserva cuando aparezca la opción “Mi reserva”. Se despliega un menú donde deberán elegir “Opciones de cambio” y, como tercer paso, elegir los nuevos vuelos de acuerdo a la disponibilidad. Por último, tienen que reconfirmar la elección. Una vez completados estos pasos, recibirán un correo electrónico con el mismo código de reserva y el nuevo itinerario.

Los gremios de aeronavegantes se reunieron para decidir los planes a seguir en la puja salarial que llevan adelante con Aerolíneas Argentinas y anunciaron un paro por 24 horasGentileza

Brey también se refirió la intensidad del conflicto al ser consultado por LA NACION: “Escaló mucho, así que hoy no puedo afirmar que se destrabe con el 25% [porcentaje que había anunciado la semana pasada]. Estamos muy lejos, porque primero lo que tienen que hacer es llamarnos a una mesa, y nadie lo hace. Así que no podría decir cuánto vamos a pedir hoy, porque no está la disposición. Es decir, por más que pidamos el 15% tampoco nos lo van a dar, porque el objetivo de ellos es otro”.

El sindicalista se refiere, al hablar de otros objetivos, a la pretensión de privatizar la compañía estatal. Sostuvo a continuación: “Ahí se delatan las sospechas que teníamos, de que la pelea, o sea, el conflicto salarial era una excusa para este objetivo final que es la privatización. Por eso nunca nos llamaron del Gobierno para destrabar la situación”.

Consultadas sobre la medida anunciada y una eventual convocatoria a los gremios aeronáuticos, fuentes de la Secretaría de Trabajo nacional no respondieron aún a este medio.

Pese a que el Gobierno quitó a Aerolíneas Argentinas de la lista de empresas a privatizar cuando buscó la aprobación de la Ley Bases, en junio de este año, hoy esta posibilidad volvió a plantearse, tras los sucesivos paros y medida de fuerza de los trabajadores. Tanto es así que incluso el presidente de la aerolínea, Fabián Lombardo, aseguró que hay varias compañías internacionales interesadas en comprarla.

Además, pidieron la expulsión de Pablo Biró, titular de APLA, del directorio de Aerolíneas. El sindicalista es el único representante de los trabajadores dentro de la empresa estatal, y ocupa este lugar desde 2019. También comunicaron que van a denunciar a los sindicatos por lo “perjuicios ocasionados, principalmente el lucro cesante de la operación y por los reclamos de los pasajeros perjudicados”.

En este sentido, las asambleas que paralizaron la actividad comercial de AA durante agosto —en aeropuertos estratégicos como el Aeroparque Jorge Newbery, Ezeiza, Mendoza y Córdoba— y el paro de nueve horas que se llevó a cabo el viernes pasado habrían representado una pérdida superior a los dos millones de dólares, según informó la empresa a través de un comunicado. Esas medidas, además, afectaron a casi 27.000 pasajeros en total. Las 24 horas anunciadas hoy representan ya la séptima medida de fuerza en menos de un mes (la primera se realizó el 19 de agosto).

Por otro lado, el secretario de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, Julio Cordero, hizo mención, en una conferencia ante alumnos en la UADE, este martes, a la posibilidad de declarar la aviación como un servicio esencial. La idea de establecer una actividad como esencial implica limitar la posibilidad de huelgas a través de “guardias mínimas”. En este caso, se podría aplicar por considerarlo de “importancia trascendental” afectan económicamente a la sociedad y le generan un impacto “demoledor”, por lo que en estos casos, deben respetar guardias mínimas.

La actividad aeronáutica ya está declarada como esencial, sostuvo, en el DNU. Las guardias mínimas deben consensuarse, es decir, hay sugerencias de la Comisión de garantías y termina de definir la autoridad de aplicación. El Gobierno mandó fiscalizadores durante el paro del viernes, y observaron que no se respetaban las guardias mínimas. “Ellos tenían el derecho a hacer huelga, porque ya se había pasado el período de conciliación obligatoria que nosotros habíamos dictado para que haya vuelos durante las vacaciones de invierno. Al no haberse decretado esto, establecemos este procedimiento para recordar que va a haber que seguirlo”, dijo Cordero.

Si la Secretaría de Trabajo dispone guardias mínimas y los gremios no las respetan, continuó, habrá sanciones pecuniarias al sindicato y la posibilidad de quitarle la personalidad gremial, un procedimiento que debería realizarse por vía judicial.

Desde la Secretaría de Transporte que comanda Franco Mogetta, sostuvieron ayer: “El sindicato pretende usar a la gente de rehén cuando las autoridades gubernamentales fueron claras en la pauta salarial ofrecida”. Y respecto a las sanciones, dijeron: “Se harán los descuentos correspondientes a los trabajadores que impidan la operación aérea en tres de los principales aeropuertos del país”.