El secretario general de la CGT Regional Mar del Plata, José Luis Rocha, lanzó duras críticas contra las políticas económicas del presidente Javier Milei y aseguró que el ajuste que está llevando adelante el gobierno tendrá consecuencias similares, o peores, que la crisis de 2001. “Estas políticas de derecha terminan como en el 2001, pero mucho más rápido. Esto es más cruel, sin empatía con los niños, los jubilados, a quienes les han vetado un aumento y les dieron un bono de $70.000 para todo 2025, sin contemplar la inflación”, señaló Rocha en una conferencia de prensa conjunta de la CGT y las dos CTA.

Las declaraciones de Rocha se enmarcan en la previa de la marcha de docentes y no docentes universitarios, prevista para este viernes en Mar del Plata, en rechazo a los recortes en el financiamiento universitario y la presencia del presidente Milei en el cierre del Coloquio de IDEA. La CGT y las CTA anunciaron que se sumarán a la protesta, en solidaridad con la comunidad universitaria y en repudio a las políticas de ajuste.

Rocha enfatizó que las medidas económicas del gobierno libertario están generando una creciente movilización de los sectores afectados. “Lo que está pasando hoy es algo natural que iba a suceder, poco a poco los sectores perjudicados iban a salir a la calle. Nos estamos juntando todos, y mañana será por el recorte universitario”, afirmó.

En cuanto a la situación general del país, el líder sindical subrayó que la población ya vivió este tipo de políticas en el pasado. “Lo vivimos en los 90, lo vivimos del 2015 al 2019, aunque no tan cruel como ahora. Hoy la ciudadanía entera está pidiendo que se termine con este gobierno de ajuste, y entendemos que esto va a terminar con toda la gente en la calle protestando contra estas medidas”, concluyó.

La marcha del viernes es vista como una antesala de un proceso de movilización más amplio en rechazo a las políticas de ajuste que afectan no solo a la educación, sino también a la salud, la seguridad social y los derechos laborales. Los sindicatos esperan que la protesta universitaria sea el primer paso de una serie de acciones conjuntas de diversos sectores para frenar lo que consideran un ataque sistemático a lo público y a los derechos de los trabajadores.