El ex secretario general del Centro de Patrones y Oficiales Fluviales de Pesca y de Cabotaje Marítimo, Julio González Insfrán, fue procesado en una causa que comenzó en diciembre pasado con una denuncia ante la Justicia por abuso sexual y amenazas agravadas en contexto de violencia de género.
En la causa, que se tramita en el Juzgado Criminal y Correccional N° 61, además le trabaron un embargo por 5 millones de pesos. La denunciante es una empleada del gremio lo había acusado de haber abusado sexualmente de ella dentro de su despacho en repetidas oportunidades bajo distintas amenazas.
Según su relato de la mujer, González Insfrán preparó el terreno de sometimiento a través de discursos donde el sindicalista le remarcaba que “soy una persona muy poderosa”, de tal forma de intimidarla y lograr su silencio.
Aunque su jefe directo era el tesorero de la obre social, Jorge Bianchi, ella cuenta que González Insfrán la citaba constantemente en su oficina, donde lentamente ejerció violencia laboral sobre ella. Pasó de hacerla sentir incómoda con tratos fuera de lugar hasta llegar a realizarle “vejaciones aberrantes” y que obviamente están detalladas en la causa pero que no suman en esta crónica periodística.
La denunciante declaró que ante los avances de González Insfrán ella quedaba paralizada, que el hombre le generaba terror y que temía perder su trabajo. Además, agregó que el dirigente la amenazaba con decirle a su marido que ella “lo provocaba”.
Destacó que pidió que la cambien de sector, pero que esto solo reforzó la situación de abuso porque González Insfrán le habría dicho que si quería lograr algo tendría que “hacérselo siempre”. Recién entonces contó que pudo hablar con un compañero de trabajo y retirarse con licencia psiquiátrica.
El capitán Julio Benjamín González Insfrán pasó a formar parte de la comisión directiva del Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje Marítimo en 2004, para luego asumir como secretario Adjunto en 2009, y como secretario General en el 2013. En su llegada a la titularidad del gremio comenzó a criticar la gestión de la entonces Presidenta Cristina Fernández de Kirchner y abrazó la llegada de Mauricio Macri a la Casa Rosada. Voceros gremiales aseguran que fue uno de los gestores de la pata sindical macrista y hasta alentó la persecución de algunos de sus pares.
En los últimos años se alineó con Marcelo Peretta, secretario General del Sindicato de Farmacéuticos y Bioquímicos y hoy líder del sindicalismo PRO, con más empresarios que organizaciones gremiales. Dicha organización cuenta con el respaldo de figuras como Patricia Bullrich y Miguel Ángel Pichetto, con quienes compartió varios eventos.
Su crecimiento y exposición en la política comenzó a afectar su liderazgo sindical, al punto tal que en febrero de este año Mariano Moreno, líder de la oposición, le ganó los comicios y lo desbancó de la secretaría General.
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