El gremio que lidera José Pihen declaró el estado de alerta en todos los centros de salud provinciales.
El Sindicato de Empleados Públicos de Córdoba desarrolla a partir de hoy un cronograma de asambleas y actos de protesta en los hospitales del territorio provincial.
Desde el gremio, que el pasado viernes se declaró en estado de alerta, plantean una serie de reclamos que la administración provincial se niega a resolver.
Uno de los principales cuestionamientos de la organización tiene que ver con los casos de persecución gremial que sufren muchos representantes. Por dicha situación, el sindicato responsabiliza a los directores de los nosocomios y a las autoridades del ministerio de Salud provincial.
"Castigan a los representantes gremiales aplicándoles quita de tareas o de funciones, con la amenaza adicional de traslado si no aceptan callar las situaciones que denuncian. El SEP respalda plenamente a los representantes de los trabajadores y utilizará todos los medios legales a su alcance para hacer efectiva su protección", indicaron desde el Sindicato de Empleados Públicos.
Otra de las demandas planteadas por el gremio que conduce José Pihen está relacionada con la falta de orgánicas, ya que hasta el momento la cartera de Salud que encabeza Francisco Fortuna solo ha entregado los borradores de orgánicas de cuatro hospitales del interior.
Además, el SEP reclama que la Provincia tome medidas ante la falta de personal en las áreas de administración, turneros, camilleros, mantenimiento y servicios generales; al tiempo que demanda el cese de las formas precarias de contratación existentes, y más seguridad para las y los trabajadores.
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