La Confederación General del Trabajo (CGT) intensificó sus reclamos al Gobierno nacional, exigiendo medidas inmediatas para evitar el colapso financiero de las obras sociales sindicales, cuya crisis pone en riesgo el acceso a servicios de salud para 15 millones de personas en todo el país.
El pedido fue reforzado ante el Ministerio de Salud en un contexto de desfinanciamiento constante, agravado por las obligaciones de cobertura a sectores con menores aportes, como monotributistas, trabajadoras domésticas y desempleados.
La CGT también enfrenta otros frentes abiertos con la administración de Javier Milei, incluida la flexibilización de las paritarias de 2025. Sin embargo, la situación de las obras sociales se destaca como una prioridad para la central sindical, que advierte sobre un escenario crítico: estas instituciones representan el 33,6% de la cobertura de salud en Argentina, abarcando a trabajadores activos, 2,2 millones de monotributistas, 130.000 desempleados y un número similar de empleadas domésticas.
El costo de la cobertura y el déficit estructural
Una de las principales causas del desfinanciamiento es el Programa Médico Obligatorio (PMO), que establece las prestaciones mínimas que las obras sociales deben garantizar. Según datos de la CGT, el costo promedio del PMO asciende a $45.000 por beneficiario al mes, incluyendo el grupo familiar. Este monto se reduce a $35.000 cuando se excluyen las prestaciones por discapacidad, financiadas por el Fondo Solidario de Redistribución (FSR).
No obstante, los aportes de ciertos sectores están lejos de cubrir estos costos. Mientras los trabajadores en relación de dependencia realizan aportes suficientes, los monotributistas contribuyen apenas $13.800 mensuales, los desempleados $14.000 y el personal doméstico $6.400. Esta brecha agrava el déficit y pone a las obras sociales sindicales en una situación de desigualdad respecto a otros sistemas de salud.
Reclamos y propuestas al Gobierno
En agosto pasado, la CGT envió un informe a Gabriel Oriolo, titular de la Superintendencia de Servicios de Salud, con una serie de propuestas para frenar el colapso del sistema. Entre las medidas solicitadas se incluyen:
- Sustituir el actual PMO por una canasta de servicios de emergencia.
- Ajustar los aportes de monotributistas y personal doméstico.
- Incrementar el reintegro del PAMI por las prestaciones brindadas por las obras sociales.
- Transferir al Ministerio de Transporte y Educación los gastos relacionados con personas con discapacidad, actualmente solventados por el FSR.
- Crear un fondo específico para financiar tecnologías de alto costo en salud.3
- Regular el aumento desmedido de medicamentos de alto valor.
El impacto en la salud de los trabajadores
Dirigentes de la CGT señalaron que esta crisis se debe a un contexto de caída de los salarios reales y el aumento exponencial de los costos de prestaciones y medicamentos. Advirtieron que el sistema sindical de salud se encuentra en desventaja frente a otros esquemas y que las autoridades gubernamentales no han ofrecido soluciones consistentes.
“La salud accesible y de calidad para millones de trabajadores no parece ser una prioridad para los distintos gobiernos”, expresó un dirigente sindical. Desde la central obrera, instaron al Gobierno a tomar medidas urgentes para garantizar la equidad y el sostenimiento del sistema.
Mientras tanto, el diálogo entre la CGT y el Ejecutivo continúa, en un intento por encontrar soluciones que aseguren la estabilidad de un sistema que es fundamental para el bienestar de millones de argentinos.
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