La sesión en el Concejo Deliberante del viernes pasado tenía pronóstico de jornada intrascendente. No había en el orden del día temas polémicos, y encima la mayoría de los concejales del Frente para la Victoria estaban ausentes, por que asistieron al acto oficial que en Morris realizaron el titular del ANSES, Diego Bossio y el Secretario de Seguridad, Sergio Berni. Sin embargo el clima de calma se alteró cuando un grupo de integrantes del Sindicato de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires –SUTEBA- irrumpió en el recinto para “reclamar y exigir que el dinero que recibe el municipio desde el Fondo de Financiamiento Educativo, se destine de una vez a las escuelas del distrito”.

Mientras la concejal acuñista estaba en el uso de la palabra, -dedicándole un homenaje a Hugo del Carril a 25 años de su muerte-, los gremialistas docentes se hicieron oir con palmas y cánticos y reclamaron reunirse con los presidentes de cada uno de los bloques. El tema es conocer en que se gasta la plata que el municipio recibe del gobierno nacional. Frente al reclamo, el concejal también acuñista, Mario Petito, hizo una interpretación errónea de la Ley y afirmó: “Eso no tiene nada que ver con las escuelas públicas, no se conviertan en idiotas útiles”. Petito volvió a equivocarse al interpretar que el fondo tiene como único destino “los jardines de infantes municipales y las escuelas de formación cultural y deportivas”.

Por su parte SUTEBA, destacó que con la movilización al Concejo Deliberante “los compañeros docentes de Hurlingham continúan manteniendo vigente el justo reclamo para que sea destinado el dinero a obras que permitan mejoras edilicias en los establecimientos educativos del distrito”.

SUTEBA señaló en un comunicado que “continúan en la lucha para que las autoridades destraben esta situación que seguramente mejoraría las condiciones de enseñanza y aprendizaje para chicos y maestros”.

El reclamo del gremio docente, coincide con la denuncia que semanas atrás, hizo el legislador bonaerense Ricardo Vago del Frente Amplio UNEN, cuando informó que el Consejo Escolar de Hurlingham es uno de los tres municipios bonaerenses que no cumple con la obligación de informar en que gasta los fondos que administra.