En el marco de los dos proyectos de ley que fueron presentados por el Frente de Todos y que actualmente se encuentran en estado parlamentario, los cuales contemplan una reducción de la jornada laboral en Argentina, “el Retrato…” se entrevistó con diferentes sindicalistas del sector docente, hotelero gastronómico y pastelero de la región a los fines de conocer su opinión al respecto.
Docentes privados: “El poder modificar la jornada de empleo”
La Secretaria General del Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop) Mar del Plata, Adriana Donzelli, en diálogo con “el Retrato…” expresó que “hay que comenzar a avanzar en revisar algunas de las cuestiones vinculadas al mundo del trabajo, siempre pensando que, de ninguna manera, puede implicar un recorte de los derechos”.
“El poder modificar la jornada de empleo, manteniendo el ingreso y generando nuevos puestos de empleo sería el escenario óptimo, porque el mundo va avanzando en ese sentido”, sostuvo la referente de SADOP Mar del Plata a la vez que afirmó que “hay que trabajar mucho el proyecto y consensuarlo, pero de ninguna manera el mismo puede implicar recortes de derechos laborales, sino todo lo contrario: mejor calidad de vida y mayores puestos de empleo”.
Asimismo, Donzelli destacó que uno de los objetivos de este proyecto es la generación de empleo. “Estamos en un mundo tan desigual en relación al ingreso y a la jornada laboral. Hay muchas personas que no encuentran empleo y muchas otras que trabajan con exceso de horas, que no tienen tiempo para la vida personal, estudiar, el desarrollo, el esparcimiento, etcétera, lo cual afecta la calidad de vida”, sostuvo.
“El poder generar condiciones para que más personas entren al sistema formal de trabajo y, a su vez, que quienes están trabajando puedan tener una mejor calidad de vida, sería lo ideal”, explicó la referente del Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop) Mar del Plata.
Pasteleros: “Es preferible que estén todos en blanco antes que trabajen menos horas”
Por otro lado, el referente del Sindicato de Pasteleros, José García, se manifestó también contra de la iniciativa. “Reducir la jornada laboral a 6 horas no está bueno ni para el trabajador ni para el empresario tampoco. La situación económica se va a complicar más aún y no es un mecanismo viable para reactivación de la economía”, anticipó.
“Hay que apuntar más que nada al aumento del empleo registrado, porque hay muchas personas que están trabajando irregularmente. Es preferible que estén todos en blanco antes que trabajen menos horas”, consideró el referente del Sindicato de Pasteleros.
En ese marco, en diálogo con “el Retrato…” remarcó las expectativas del sector, en relación a la temporada de verano, que se aproxima. “No estamos teniendo problemas y se está reactivando el trabajo. Se han abierto más horas los cafés, pizzerías, heladerías, etcétera, lo cual influye mucho al sector y de a poco se está levantando la vara”, apuntó.
“Antes de la pandemia ya había muchos trabajadores sin registrar, pero con el tema de la pandemia la situación empeoró. Hay empresarios oportunistas, que aprovechan de lo que pasó y los que más perjudicados terminan siendo son los trabajadores”, concluyó el referente del Sindicato de Pasteleros, José García.
Pablo Santín: “Hay problemas mucho más graves como la precarización laboral”
Por su parte, el candidato a Secretario General de la UTHGRA y referente de la Agrupación 25 de mayo, Pablo Santin, en diálogo con “el Retrato…” adelantó que, si bien debería estudiar con mayor profundidad el contenido de cada uno de los proyectos que prevén una reducción de la jornada laboral, no está de acuerdo con la iniciativa.
“Hoy nuestra actividad tiene otros problemas mucho más graves como la precarización laboral. En la hotelería y gastronomía es muy difícil hablar de jornadas de 6 horas semanales cuando habitualmente hay compañeros que trabajan 10 o 12 horas para llegar a fin de mes”, sostuvo el dirigente gremial.
En tal sentido, Santin señaló que en el sector se encuentran atravesando problemas “gravísimos” como para pensar en una reducción de la jornada laboral. “Hay compañeros que tienen recibos de sueldo con la mitad en negro y la mitad en blanco, otros que están trabajando informalmente, etcétera”, indicó el referente del sector hotelero/gastronómico.
“En lo que es nuestra actividad veo bastante inviable al proyecto de ley, ya que hay muchos problemas serios como por ejemplo también la carga impositiva, lo cual lleva a que sea muy caro tener un trabajador en blanco”, agregó el referente de la Agrupación 25 de Mayo y comentó que, sin perjuicio de ello, “si la iniciativa contempla la no modificación del sueldo y siempre que sea favor del trabajador, es positiva”.
En ese contexto y salvando dicha situación, consideró igualmente que el proyecto “es inviable” en el sector. “Ya de por sí es muy difícil tener en la actividad trabajadores en blanco y es una lucha constante que se blanquee a los empleados. Si se baja la carga horaria a 6 horas, sería más complicado aún”, anticipó y comentó: “Sería muy difícil que las empresas que tienen pocos recursos puedan sostener su situación económica”.
“Nuestros trabajadores tienen problemas muy serios, que en realidad son prioridad actualmente y hablar de una reducción de carga horaria hoy sería hasta cómico. Primero tienen que estar en blanco, tener una obra social, un recibo de sueldo completo, respetar los 6 años por mes, etcétera”, expresó.
Por último, Pablo Santin resumió: “Si se mira la reducción de la jornada horaria como beneficio del trabajador sería extraordinario, pero a comparación de los problemas que existen en el sector no sé si es redituable para esta industria”.
¿Qué dicen los proyectos?
Vale la pena recordar, que actualmente existen dos proyectos de ley para la reducción de la jornada laboral en Argentina. El primer proyecto, propuesto por la diputada del Frente de Todos y dirigente de la Asociación Bancaria Claudia Ormaechea, propone una jornada laboral de un máximo de seis horas por día, y un tope de 36 horas semanales mientras que la letra del proyecto de ley, presentado por el Secretario General de la Central de Trabajadores de Argentina (CTA) y diputado nacional por el Frente de Todos, Hugo Yasky, propone reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales, lo cual significa no más de 8 horas diarias y sin disminución o supresión salarial alguna.
Si bien los argumentos son variados, entre los mismos se encuentra principalmente el hecho de mejorar la calidad de vida de los trabajadores y trabajadoras, argumentando que los casos en donde se implementó creció la productividad, se redujeron los accidentes laborales y el ausentismo, entre otros aspectos.
Según lo que Jan-Emmanuel De Neve, director del Centro de Investigación del Bienestar de la Escuela de Negocios de la Universidad de Oxford, afirmo para la BBC, todos los estudios sobre una semana laboral de cuatro días que han analizado han mostrado resultados positivos en términos de productividad, entendida como la cantidad de trabajo que se hace en un tiempo definido. Resaltó también que la pauta para comprender el aumento de la productividad es el bienestar general que se genera en los trabajadores.
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