La reciente reforma laboral, promovida por el gobierno actual, generó una fuerte controversia y rechazo entre los defensores de los derechos laborales. En entrevista con La Marca de la Almohada, Sebastián Serrano Alou, abogado laboralista e integrante de la Asociación de Abogados y Abogadas Laboralistas de Rosario, expuso con contundencia las implicaciones negativas de estas modificaciones legislativas.

Se implementa un sistema simplificado con un aporte único para empresas con hasta 12 empleados, además de un sistema de condonación de multas por trabajador no registrado. Serrano Alou criticó esta medida, señalando que fomenta la no registración laboral, lo que priva a los trabajadores de derechos básicos similares a los que otorga el Estado al emitir un DNI.

El período de prueba se extiende de tres a seis meses, con la posibilidad de ampliarlo a ocho meses para pymes y hasta un año para empresas con menos de cinco empleados. “La segunda parte del plan es que el trabajador no se sienta parte del trabajo, ampliando periodos de prueba hasta un año en algunos casos”, afirmó Serrano Alou, subrayando la inestabilidad y precariedad que esto genera.

Se crea un fondo alternativo a las indemnizaciones tradicionales por despido, financiado con aportes mensuales del empleador, que no superarán el 8% del salario. Serrano Alou comparó esta medida con la ley de los trabajadores de la construcción, criticando que facilita el despido y precariza aún más las condiciones laborales, llevando a salarios miserables y falta de acceso a créditos.

Se introduce la figura del trabajador “colaborador”, reduciendo de cinco a tres el número de colaboradores que los trabajadores independientes pueden emplear sin que se considere una relación de dependencia. Serrano Alou explicó que esta figura disfraza la relación laboral, permitiendo que el empleador sea considerado un trabajador independiente y los empleados como colaboradores, negando así el carácter de relación laboral y los derechos asociados.

Se incrementa la indemnización en casos de despido por motivos discriminatorios. Aunque esta medida parece positiva, Serrano Alou destacó que es insuficiente frente al contexto general de la reforma, que busca debilitar los derechos laborales en su conjunto.

Se prohíbe el trabajo para mujeres o personas gestantes durante los 45 días anteriores y posteriores al parto, permitiendo reducir la licencia previa al parto a un mínimo de 10 días y acumular el resto al período postparto. Esta modificación, aunque parece flexibilizar la licencia, no aborda las necesidades reales de las trabajadoras gestantes, según Serrano Alou.

Sebastián Serrano Alou concluyó la entrevista subrayando que estas reformas no son novedosas, sino que replican políticas de flexibilización laboral que ya han demostrado ser perjudiciales en el pasado. “No es la primera vez que sucede en nuestra historia, pasó durante la dictadura genocida militar en 1976 y en los 90’s, con mucha flexibilización laboral, niveles récord de pobreza y desempleo”, recordó, haciendo hincapié en las consecuencias devastadoras que estas políticas pueden tener para el conjunto de los trabajadores en la actualidad.