En medio de un clima de temor e incertidumbre, más de 320 trabajadores de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) en la República Argentina fueron despedidos en las últimas horas, generando una ola de preocupación entre los empleados y rumores sobre posibles cierres de oficinas de atención en todo el país.

Los pasillos del organismo se llenaron de fuertes rumores que apuntan directamente a Leonardo Fabre, secretario general de la Asociación del Personal de los Organismos de Previsión Social (APOP), como el responsable detrás de estas cesantías masivas. Alegaciones sugieren que Fabre habría facilitado la elaboración de una lista de empleados a ser despedidos, la cual fue entregada a los nuevos directores del organismo, quienes supuestamente buscan saldar cuentas con la gestión anterior.

De acuerdo con fuentes cercanas a ANSES, Fabre habría llevado a cabo estas acciones con la finalidad de obtener nombramientos para dirigentes y allegados a su sindicato. Una fuente reveló a este medio que esta polémica práctica sindical estaría vinculada a un caso reciente: la designación de Isaías Carreño, vocal titular de APOPS, como el nuevo jefe de la UDAI San Cristóbal.

En este contexto, APOPS ha experimentado un notable deterioro en su representatividad, perdiendo su posición como sindicato mayoritario de ANSES. Esto, alegan los críticos, se debe a acuerdos realizados durante la gestión de Mauricio Macri y, más recientemente, con los designados por Javier Milei, lo que ha debilitado su influencia entre los trabajadores del organismo.

Es importante señalar que los más de 300 despidos afectaron a trabajadores de planta permanente, quienes habían ingresado por concurso entre los años 2020 y 2023.