Se trata de Pedro Zambelletti, el jefe del sindicato de la pintura. Se lo acusa de proscribir listas opositoras a su conducción y de organizar patotas para acallar conflictos obreros en su propio gremio.
Pedro Victorio Zambelletti es secretario general de Unión de Personal de Fabricas de Pintura y afines ( U.P.F.P.A.), ocupa este cargo desde el 27 enero de 1974 y es el segundo dirigente gremial con más antigüedad en su cargo de la Argentina. Solo lo supera Ramón Antonio Baldassini, secretario general de la Federación de Obreros y Empleados de Correos que lleva 53 años en su puesto. Sin embargo, pese a esta larga trayectoria en uno de los sindicatos industriales más importantes del país como es el gremio de la pintura, Zambelletti es un hombre oculto. No se le conocen entrevistas, sus registros fotográficos son casi inexistentes y mantiene un perfil bajo de manera permanente, a pesar de que Infobae pudo hablar con Zambelletti para la realización de esta nota.
Actualmente la oposición interna en su gremio lo denuncia por haber proscripto una lista para mantenerse en el poder. El expediente con la denuncia se encuentra en el ministerio de Trabajo a la espera de la resolución por parte del ministro Jorge Triaca. No es el primer episodio oscuro en la trayectoria de Zambelletti, un dirigente que siempre se mantuvo en las sombras de uno de los sindicatos industriales más importantes del país.
"Zambelletti proscribió nuestra lista de una manera fraudulenta, a través de la Junta Electoral- dice a Infobae Juan Manuel Vidoret, candidato de la Agrupación Justicialista 8 de octubre, la opositora lista Verde-. Es un atentando a la democracia sindical de un personaje que quiere perpetuarse en el poder".
-Usted formaba parte de la dirección del sindicato con Zambelletti, ¿por qué se fue?
-Yo era secretario de actas y cuando empecé a cuestionar los métodos del sindicato, la falta de democracia, el autoritarismo y la connivencia con los empresarios, fui expulsado del gremio. No soy el único que rompió con la dirección, formamos una agrupación amplia que incluye a también a delegados que tiene orientación de izquierda. Nos proscribieron a pesar de tener todos los requisitos para presentarnos y por eso estamos presentando este reclamo ante el ministerio de trabajo.
Pedro Victorio Zambelletti tiene una larga lista de episodios discutibles e incluso denuncias penales en la Justicia. El mismo año de su asunción al frente de su sindicato, hace ya 43 años, dos delegados opositores fueron asesinados por la Triple A y se investiga la participación del gremio en los hechos.
El 13 de diciembre de 1974 Jorge Fischer y Miguel Bufano, dos trabajadores de la fábrica Miluz y miembros de la Comisión Interna, fueron secuestrados cuando se retiraban de su trabajo. Dos días después sus cadáveres aparecieron en Avellaneda, con sus ropas cambiadas y envueltos en una bandera del ERP. Tenían 23 y 25 años y eran militantes de Política Obrera.
Los asesinatos de Fischer y Bufano forman parte de la causa conocida como "AAA o Alianza Anticomunista Argentina" que investiga la "asociación ilícita creada por el ex ministro de Bienestar Social José López Rega, que tenía como objetivo la realización de diversos delitos como homicidios, lesiones, amenazas". La causa cuenta con 681 casos. Pero esta demanda judicial solo se centra en la figura de López Rega, dejando de lado la complicidad que pudieron tener los sectores sindicales ligados al gobierno justicialista e incluso el rol histórico de Perón en la formación de este grupo parapolicial.
Según los trabajadores de la fábrica Miluz, Zambelletti había ingresado a sus partidarios en la planta para amedrentar a los delegados combativos que amenazaban con formar un oposicion en el sindicato.
"Así como denunciamos que los crímenes de la dictadura hubo una participación civil que respondía a una parte del empresariado sostenemos que en los asesinatos de la Triple A hubo una complicidad de las burocracias sindicales que entregaron listas y promovieron los homicidios de los opositores a sus mandatos", dice Claudia Ferrero abogada de la Asociación de Profesionales en Lucha (APEL) y patrocinante de los familiares de Fischer.
Jorge Fischer fue amenazado mediante un volante del grupo de Zambelletti que decía: "Señor Marxista Fischer…, sepa que ningún peronista puede estar en la causa de un marxista clandestino y perseguido como Ud. por la Justicia que reniega de todo lo obrero y la Nación… pero todo tiene su castigo la justicia divina de los hombres será implacable con Usted y su gavilla de tarados útiles". Días después de la amenaza ocurrió el asesinato. "Los compañeros de trabajo de mi marido me aseguraron que Zambelletti estuvo detrás de la entrega de Fischer y Bufano a las bandas de la Triple A", dice a Infobae Viviana Asrilant, viuda de Jorge Fischer e impulsora de la investigación sobre su asesinato.
La patota
En 2009 la ciudad de San Luis se vió conmovida por la llegada de grupos patoteriles liderados por Zambelletti cuya intención era acallar el reclamo de los obreros de la fábrica Tersuave. Según El Diario de la República, de San Luis, en su edición del 30 de Julio de 2009, el arribo de Zambelletti se produjo al grito de "se acabó la fiesta, no somos carmelitas descalzas, somos carapintadas".
Zambelletti cumplió con sus objetivos. El sindicalista tiene un registro de CUIT a su nombre que lo habilita para realizar servicios de asesoramiento, dirección y gestión empresarial realizados por integrantes de los órganos de administración y/o fiscalización en sociedades anónimas. Una actividad que pareciera ser distante con las tareas de conducción gremial.
Luego de varios intentos, Infobae pudo hablar con Pedro Victorio Zambelletti para discutir algunas de estas polémicas.
-Una agrupación opositora a su conducción denuncia que el sindicato los proscribió en la última elección. Es el gremio que usted dirige desde 1974, ¿no es cierto?
-Sí, señor, nosotros nos presentamos, sacamos el 75% de los votos, en la fábrica de ellos amenazaron a la gente que no vote, en este momento renunciaron tres de la lista de ellos por los métodos que están utilizando que no son los normales. Nosotros creemos que vamos a asumir si el ministerio aprueba las cosas como está haciendo.
-Pero usted dirige el sindicato desde 1974, hace más de cuatro décadas.
-Sí, yo estoy desde el 27 de enero del 74. Fui elegido en las últimas elecciones por el 99.8 por ciento de los afiliados.
-También tiene un denuncia por su presunta participación suya por el asesinato de Fischer y Bufano, delegados opositores a su conducción ese mismo año de 1974.
-Nosotros tuvimos problemas. No sé, señor, qué hay sobre esto, la verdad es una cosa que lamentamos todos lo que ocurrió.
-¿A usted no le extraña que una persona esté al frente de un sindicato tantos años?
-No me extraña porque hay algunos que están desde hace mucho más.
-Hay solo un sindicalista con tiempo al frente de su sindicato que usted, que es el del correo.
-Estoy en una reunión, señor, llámeme en otro momento.
Comentá la nota