Además, anunció que su sindicato se movilizará en contra de la proyectada tasa vial. “Y si esto sigue adelante y no hay modificaciones, seguramente tomaremos medidas de fuerza mayores”, afirmó en diálogo con Radio Universidad.

El proyecto de ley oficialista impondrá una gravamen de 20 centavos para las naftas súper y común y para el gasoil común, y de 40 centavos para la nafta y el gasoil premium, en todas las estaciones de servicio de la provincia.

Sobre las consecuencias que tendría la implementación de este tributo, Borelli señaló: “Este impuesto va a transformar a Córdoba en una de las provincias más caras”. Y añadió: “El Gobierno provincial no piensa en la posibilidad de pérdida de fuentes laborales de los petroleros, que no son agentes de retención”.

Agregó que “el dinero saldrá, seguramente, del playero o el automovilista, pero te aseguro que no lo va a pagar el patrón”.