Esgrimiendo como argumento los índices inflacionarios del país, el Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación de Chubut (STIA) hizo su primer planteo en el inicio de la negociación paritaria, y trasladó su requerimiento a la Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras (CAPIP).

La organización sindical giró una nota a la cámara signataria en virtud de la finalización del periodo 2020/2021 del acuerdo paritario anual del Convenio Colectivo de Trabajo 372/04 y subsiguientes.

El STIA formalizó el pedido del 45 por ciento de aumento para los trabajadores de la actividad. “La recomposición salarial, que pretende esta entidad, está basada en los cálculos porcentuales de la inflación anual que nos permite saber cuánto poder adquisitivo perdió el y la trabajadora del sector en este último año”, argumentan al exponer el porcentaje que pretenden de aumento.

De esta forma, “la primera solicitud de recomposición formal es de 25 mil pesos mensuales no remunerativos y un bono extraordinario anual de 30 mil pesos”, explicaron desde el Sindicato. “Restará entonces, ver cuál es la contrapropuesta de la Cámara empresaria, y poder consensuar la forma en la que el monto solicitado se vuelque al salario de las y los trabajadores”, añaden en la apertura de la negociación paritaria.

En este marco, cabe tener en cuenta que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) dio a conocer semanas atrás el nuevo informe mensual del Índice de Precios al Consumidor (IPC) en el cual se detalla que la inflación de marzo fue del 4,8% en todo el país, la cifra más alta desde el pico de septiembre de 2019, cuando se registró 5,9%. Con esos índices, se acumula en lo que va del año un 13%.

El Indec, además, dio a conocer que la variación interanual, es decir, la inflación acumulada en los últimos 12 meses, entre abril de 2020 y abril de 2021, la cual pasó a ser de 42,6%.

En los últimos años, el STIA y la CAPIP instrumentan una mecánica de aumento salarial que consiste en montos no remunerativos y un bono, los que posteriormente son paulatinamente transformados en remunerativos.

Las negociaciones están en marcha y dependerá de las madurez de las partes en mantener esa vía de diálogo para concretar un acuerdo sin necesidad de plantear un escenario de conflictividad, con todas las complicaciones que ello supone, más aún en un contexto tan delicado como en actual.