El macrismo resultó un período de cuatro años que se caracterizó por el retroceso en materia de derechos laborales. Hubo constantes ataques a la legislación laboral, a los convenios colectivos de trabajo y a los beneficios conseguidos en los años previos. Sin embargo, en ese contexto, el gremio de mecánicos, SMATA, logró sostener una de las conquistas que es la envidia del propio Hugo Antonio Moyano.

Se trata del Salario 14, un salario adicional que los mecánicos cobran todos los años con los haberes de diciembre. En la práctica se podría interpretar como una especie de bono de fin de año institucionalizado, sin conflictividad, pero con montos que superan ampliamente la media del mercado de trabajo.

De hecho, mientras que Moyano pactó un bono de 100 mil pesos en cuotas para los Camioneros, los representados por Ricardo Pignanelli cobraron su salario, más un salario básico extra de su categoría, más el medio aguinaldo.

Con otras diferencias que cobraron como bono de fin de año los 24 mil pesos fijados por DNU, la diferencia es todavía mayor.

El Salario 14, llamado así por ser un haber adicional a los 12 sueldos y al aguinaldo, fue un viejo sueño de Camioneros que en varias ocasiones buscó rubricarlo en su convenio colectivo. Se topó siempre con la negativa férrea de las empresas.

También lo buscaron otros gremios de actividades industriales en la etapa de crecimiento. Sin embargo no pudieron abrochar la conquista en los años de bonanza y ahora se convirtió en un imposible.