Las fallidas elecciones en la obra social de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT), Asunt, han sumado un capítulo más para la polémica. El apoderado de la lista "Adiunt en lucha", Diego Toscano, presentó ante la justicia federal pruebas que darían cuenta de que la Junta Electoral de la UNT autorizó la ampliación de las pericias caligráficas un día antes de que la lista opositora lo solicitara. 

La autorización figuraba con fecha del 17 de octubre y la solicitud remitida por el apoderado de la lista afín al Rectorado, Felipe Rougés, tenía fecha de recepción del 18. Las elecciones estaban previstas para el 20, pero 24 horas antes una resolución de la Junta Electoral resolvió suspenderlas y dar de baja a la lista de Adiunt por supuestas irregularidades en los avales. La resolución estaba firmada por los decanos Rosa Castaldo (Psicología) y Héctor Navarro (Agronomía), miembros de la Junta Electoral de la UNT. Aducían que según pericias caligráficas se habían detectado firmas apócrifas de avales y hasta de candidatos. 

Los miembros de la lista de Adiunt presentaron un recurso de amparo y una medida cautelar ante el juzgado federal N°1 de Daniel Bejas. Ahora agregaron esta nueva prueba para que el juez la tenga en cuenta al momento de resolver. "Estos elementos demuestran diferencias en las fechas de una misma resolutiva, por lo que deberá determinarse sobre una posible adulteración en el contenido del acto emitido por la Junta Electoral", comentó Toscano, quien figuraba como candidato a consejero directivo de Asunt. Y agregó: "Los elementos demuestran la nulidad del mismo y deja a las claras un proceder arbitrario en beneficio de la lista oficial y en desmedro de los derechos de todos los docentes interesados en el futuro de Asunt". 

Desde el gremio que representa a los docentes de la UNT consideraron como un golpe de estado del Rectorado la suspensión de la elecciones. Días antes, este diario había informado que el déficit de la obra social era alarmante: $10 millones hasta fines de 2015. Lo más curioso es que en 2009 había registrado un superávit de $9 millones. Por lo tanto, en seis años las sucesivas administraciones llevaron las cuentas de la obra social, del verde al rojo. 

El apoderado de la lista "Unidad y compromiso universitario" dijo que no conocía sobre estas notas y las incongruencias con las fechas. Comentó que el jueves presentó ante la justicia los resultados de la pericia definitiva a lo que agregó un hecho nuevo. Según Rougés, además de las firmas apócrifas, la lista de Adiunt "no cumpliría con el requisito del 5% de los avales para participar en las elecciones de docentes de Asunt conforme lo dispuesto en el art. 6 del régimen electoral interno de la UNT". 

Por lo tanto planteó que Adiunt "no cumplió con el requisito de presentación de los avales necesarios para participar en las elecciones docentes de ASUNT, ni tampoco cumplió con el requisito de integridad de lista, pues existen cuatro firmas falsas de sus candidatos, cuando mínimamente debería tener seis candidatos". 

Los días previos a las elecciones -que no se realizaron- los empleados de la obra social habían efectuado varias protestas. El presidente de Asunt, Diego Silvera, reconoció que el clima interno era de una "tensa calma". Los motivos nunca estuvieron muy claros, algunos señalaban que era por reclamos laborales y otros por internas políticas.