Por Claudio Garibotto

Una semana atrás, desde el Sindicato de Empleados Textiles de la Industria y Afines (SETIA) manifestaban la necesidad de una “urgente” reapertura de las negociaciones paritarias ante las dos federaciones empresarias de la actividad. Este lunes, Gestión Sindical dialogó con José “Vasco” Minaberrigaray, y el conductor de los textiles afirmó que el tema está encaminado, aunque advirtió que “sabemos que no será fácil este año, y lógicamente hay una brecha entre lo que uno pretende y lo que puede obtener”. En cuanto al porcentaje de aumento que estima acordar dijo que “estamos viendo que algunas paritarias se están cerrando alrededor del 30%, y el Ministerio de Trabajo habló de que algo esperable era entre un 26% y un 30%. Así que seguramente andará por ahí”.

El “Vasco” detalló que con la Federación Argentina de la Industria de la Indumentaria y Afines (FAIIA) “ya tuvimos una primera reunión y seguiremos avanzando en un acuerdo”. Mientras que la Federación de Industrias Textiles Argentina (FITA) “nos dijo el viernes pasado que van a formar una comisión paritaria para también empezar a negociar”. De esta manera, aguarda que en los próximos días se defina el tema.

Durante la pandemia del Covid-19, el sector textil fue uno de los más afectados, ya que hubo conflictos en fábricas de grandes marcas que produjeron despidos y no pagaron salarios. Pero con la intervención del SETIA los temas fueron encontrando una solución: “Logramos que Cheeky pagase el 100% de los sueldos, cuando querían hacerlo al 75%. Y en Complot tuvimos la situación de que decidió cerrar los locales que tenía en los shoppings, y en plena pandemia despidió a todos los trabajadores. Nos reunimos con ellos y logramos que todos los compañeros sean reincorporados”. En este caso, lo que hizo Complot fue reubicar a los trabajadores en otras sucursales, “además de que la idea es que seguramente inauguren más locales en distintos puntos del país”.

Por último, el líder de SETIA se refirió a otra empresa con la cual suelen tener conflictos: “En Legacy es donde está más complicado el panorama, porque acostumbran a caer en falta de pago. Es por eso que tenemos reuniones permanentemente para que se pongan al día, porque ellos lo hacen durante unos meses y después se atrasan de nuevo. Es un caso difícil, porque es una empresa que está convocada y que en muchas ocasiones llega a deber siete u ocho meses de sueldo. Esta semana deberían ponerse al día de acuerdo a lo que hablamos. Y, a partir de ahí, estaremos atentos para ver cómo siguen”.