La postura del empresariado reiteró su postura de no acceder a las demandas sindicales que hacen a la recomposición salarial de los trabajadores y trabajadoras que en estos tiempos se encuentran dando batalla cotidiana contra el COVID-19, aun a costa de arriesgar su propia salud e incluso, su propia vida.

En tal sentido, desde la organización sindical advirtieron que “no vamos a aceptar mas dilaciones ni negativas, no vamos a resignar poder de compra de nuestros salarios”, al mismo tiempo voceros sindicales agregaron que “en las últimas asambleas realizadas el último 25 de marzo, en los establecimientos de todo el país, los trabajadores manifestaron unánimemente su adhesión al plan de lucha”. 

Desde FATSA explicaron que “con la contundencia de los paros realizados el 26 de marzo los trabajadores expresaron su disconformidad y la necesidad de mejorar sus ingresos. La adhesión casi total a la medida de fuerza convocada por nuestra organización legitima el reclamo e interpela a los empresarios, autoridades nacionales, provinciales, a las autoridades de los organismos de la seguridad social y al resto de los funcionarios involucrados en la resolución de este conflicto”. 

“Ignorar nuestro reclamo solo agudizará el conflicto y las consecuencias pueden ser muy graves y costosas para todos los ciudadanos en términos humanitarios. El trabajo, el profesionalismo y el compromiso deben ser retribuidos con salarios que nos permitan sostener nuestra calidad de vida. Nunca trabajamos tanto y cobramos tan poco”, sentenciaron fuentes gremiales.

Por último, la organización que lidera West Ocampo, expresó: “Esperamos que los empresarios y los demás responsables políticos de esta situación intolerable, actúen con celeridad que esta crisis demanda en la búsqueda de soluciones, nuestra paciencia tiene un límite”.