Trabajo, un índice el cual da de qué hablar

Trabajo, un índice el cual da de qué hablar

En el segundo trimestre de 2024, los datos del Indec revelan una preocupante caída en la remuneración a los asalariados, que descendió al 43,4% del producto interno bruto (PIB), frente al 45% del año anterior. Esto indica un deterioro significativo para los trabajadores, mientras que la participación de la ganancia empresaria se mantuvo prácticamente estable en 45,1%. Esto sugiere que, aunque los asalariados están en una situación más precaria, los empresarios tampoco están viendo mejoras notables.

 

La proporción de cuentapropistas y autónomos creció al 13,8% del PIB, destacándose como la única categoría que aumentó su participación en el producto agregado. Sin embargo, el Gobierno ha propuesto un aumento en el impuesto del monotributo, lo que podría complicar aún más la situación para este grupo.

Análisis de la Distribución del Ingreso

El informe muestra que, en términos de distribución del ingreso, la remuneración al trabajo asalariado perdió 1,65 puntos porcentuales en comparación con el año anterior. En contraste, el excedente de explotación bruto de las empresas apenas se redujo en 0,01 puntos porcentuales, con contribuciones positivas de sectores como la intermediación financiera y la agricultura, pero afectadas negativamente por el comercio y la industria manufacturera, que enfrentan serios problemas debido a la crisis económica.

Empleo y Horas Trabajadas

En cuanto al empleo, el total de puestos alcanzó 22,267,000, con un ligero incremento del 0,5% respecto al mismo trimestre del año anterior. Sin embargo, el crecimiento se atribuye principalmente a un aumento en los trabajos no asalariados y a la informalidad. Los sectores más perjudicados incluyen la construcción y la industria manufacturera, que han visto caídas en el empleo, mientras que el sector de servicios, especialmente en salud y doméstico, experimentó un crecimiento.

Las horas trabajadas cayeron un 1,6% en términos interanuales, afectando a todos los grupos de trabajadores. Los asalariados registrados vieron una disminución del 1,8%, y los no registrados sufrieron una baja más severa del 2,8%. En cambio, los cuentapropistas apenas retrocedieron un 0,1%, lo que indica una mayor resiliencia en este segmento.

La tendencia general sugiere un empobrecimiento de la clase trabajadora y un estancamiento de la ganancia empresarial, en un contexto donde el empleo se está transformando, con un aumento notable en la informalidad y en el trabajo autónomo. Las medidas fiscales del Gobierno, como el aumento del impuesto al monotributo, podrían agravar aún más la situación de los cuentapropistas en un ambiente ya complicado por la falta de crecimiento y la caída de las horas trabajadas.

Comentá la nota