La tasa de desocupación en Argentina creció al 7,7% en el primer trimestre de 2024, según informó el INDEC. Este aumento de dos puntos porcentuales respecto a finales de 2023 refleja el impacto de la devaluación, la inflación y la recesión.
El informe del INDEC revela que hay 400 mil trabajadores menos en los 31 aglomerados urbanos que mide el instituto. Extrapolando estos datos a la población total, se estima que 1,7 millones de personas están actualmente desocupadas, lo que significa un incremento de 525 mil desocupados en solo tres meses.
La tasa de actividad se ubicó en 48,0%, una caída de 0,6 puntos porcentuales respecto al trimestre anterior. La tasa de empleo también descendió, situándose en 44,3%, 1,5 puntos porcentuales menos que en el último trimestre de 2023. Por su parte, la tasa de desocupación aumentó de 5,7% a 7,7%.
Dentro de la población ocupada, el 74,7% son asalariados, pero el 35,7% de ellos no cuenta con descuento jubilatorio. Además, el 21,9% son trabajadores por cuenta propia, el 3,2% son patrones y el 0,3% son trabajadores familiares sin remuneración. Cabe destacar que el 4,3% de los asalariados utilizó sus propias herramientas para trabajar, y el 7,6% trabajó desde casa, un número que ha disminuido desde la pospandemia.
En términos de nivel educativo, el 60,3% de las personas ocupadas tiene hasta secundario completo, mientras que el 39,7% posee estudios superiores o universitarios.
La desocupación sigue mostrando desigualdades de género: 8,4% para mujeres frente a 7% para hombres. Regionalmente, el Gran Buenos Aires y la región Pampeana registraron las mayores tasas de desocupación con 9,0% y 6,8% respectivamente, mientras que la región de Cuyo tuvo la tasa más baja con 4,5%.
Entre las personas desocupadas, el 72,7% tiene hasta secundario completo, y el 27,3% cuenta con educación superior o universitaria. Además, el 71,7% de los desocupados lleva buscando empleo entre uno y doce meses, mientras que el 28,3% ha estado buscando por más de un año.
Estos datos reflejan una situación compleja en el mercado laboral argentino, marcada por la recesión económica y las consecuencias de la devaluación. La caída en la tasa de empleo y el aumento en la desocupación son señales claras de los desafíos económicos que enfrenta el país en 2024.
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