Los que circulamos desde temprano por Tucumán ya podemos ver las cuadrillas de cosecheros que se nuclean en los principales accesos a las ciudades para ir a las fincas comenzó a moverse la cosecha de limón 2023.

El malestar entre los cosecheros es generalizado. Dieron por comenzada la cosecha de este año pero en las fincas siguen pagando el precio del 2022 cuando tan solo en marzo la inflación fue del 7,7% y la interanual ya supera el 104.3%

¿Por qué calla la UATRE frente a esta situación?

Como ya trascendió por distintos medios la UATRE entró en paritarias recordemos que el año pasado la UATRE estaba dispuesta a firmar una paritaria del 48%, aumento que fue rechazado por los trabajadores del limón que después de varias jornadas de lucha con cortes de ruta y movilizaciones lograron romper el techo salarial y cerrar una paritaria del 64.7%, aumento que de todas maneras demostró ser insuficiente frente a la escalada inflacionaria.

Con la ambición de maximizar sus ganancias, que ya son siderales, las patronales del limón vienen llevando adelante una serie de ataques contra los trabajadores del sector, unos meses atrás con el fin de tercerizar y precarizar a parte de su planta Citrusvil y Citrícola San Miguel avanzaron con más de 400 despidos a trabajadores del empaque. Envalentonados por el “dólar soja” que el Gobierno Nacional cedió a las patronales del agro los empresarios del sector empiezan a hablar de la necesidad de contar con un “dólar citrus”. No olvidemos que la actividad del limón cuenta con un régimen impositivo especial, no paga retenciones.

Las patronales ganan por todos lados. Este escenario de ataques a los trabajadores puede empeorar si tenemos en cuanta que las patronales vienen anunciando que este año caería la exportación de fruta destinándose un mayor porcentaje a la industria. La maleta de fruta exportable tiene un precio mas alto para el trabajador siendo la que marca una diferencia en los ingresos de los cosecheros.

Como venimos viendo estos últimos años la UATRE viene cumpliendo un rol de contención de los trabajadores del limón, manteniendo la paz social mientras las patronales hacen sus negocios a costa de los trabajadores y el Gobierno les garantiza las ganancias. La interna entre Remache Ferreyra y Germán Ferrari por la caja y sucesión de la UATRE Tucumán no representa a los trabajadores, ambos trabajan para las patronales, Jaldo y Manzur .

Victor Santillán, referente de la agrupación Obrera/os de empaque y de cosecha (MAC), planteó: “La situación no da para más y que mañana martes salimos a las rutas vamos a participar de los distintos cortes que se realizarán en la provincia. Tenemos que organizarnos en asambleas por fincas y en las distintas zonas para poner en pie instancias de coordinación que voten un plan de lucha desde el norte hasta el sur de la provincia para hacernos fuertes y exigirle a la UATRE que ponga todos sus recursos a disposición para vencer a las patronales de ACNOA y conquistar unas paritarias al 100% sobre la cláusula de revisión que este acorde a la escalada inflacionaria que hay en el país tenemos que luchar por una maleta a 300 pesos por el jornal garantizado, la obra social todo el año y el fin del destajo”.