El encuentro tuvo lugar la semana pasada en la sede histórica de la CGT Corrientes, ubicada por calle Yrigoyen. Cabe señalar que la delegación local de la central obrera está acéfala hace casi dos décadas, luego de ríspidos intentos de diferentes referentes gremiales por lograr la conducción.

El pasado 15 de noviembre, el coordinador de Interior de la confederación estuvo en Corrientes donde se reunió con dirigentes gremiales locales como Saúl López, del Sindicato de Cerveceros; Mariela Barboza, de SUTERH; Juan Carlos Vallejos, Sindicato de Panaderos; María del Valle Valenzuela, de UTHGRA, entre otros.

"La unidad es fundamental para que construyamos el poder de los trabajadores para determinar las políticas necesarias para nuestros intereses", dijo Otero durante el encuentro con representantes sindicales. Según indicó el referente, quien trabajó en la normalización de varias delegaciones, "los gremios confederados deberán presentar sus avales e iniciar un plan estratégico para consolidar este primer paso y concluir con la unidad definitiva".

Por el momento, los liderazgos continúan en conformación. Para el titular de las 62 Organizaciones Sindicales Peronistas, Rodolfo "Tito" Cerdán "hoy hablar de la normalización de la CGT Corrientes sin incluir a todos los sectores es una verdadera utopía lejos de la realidad". El también integrante de la comisión de Telefónicos había expresado su respaldo al representante de Camioneros, Emilio Rotela, para liderar la CGT Lealtad Combativa.

Disconformidad de AGREPOL

La Asociación Gremial de la Policía de Corrientes (AGREPOL) manifestó su disconformidad con el anuncio de aumento salarial dispuesto la semana pasada por el Gobierno de Corrientes. "Ello es así porque nuestras expectativas estaban por encima de la línea de pobreza o la Canasta Básica Total", expresaron desde el gremio a través de un comunicado. Para el cabo de policía que recién inicia "pretendíamos un sueldo digno de bolsillo de $124 mil y para el suboficial mayor de $209 mil", indicaron desde la asociación.