Además, alertó sobre la inacción del movimiento sindical y llamó a la unidad para enfrentar las políticas que, asegura, benefician a las grandes corporaciones.

“Este gobierno plantea un déficit cero que es como dejar de alimentar a tus hijos para ahorrar dinero. Eso sí, las familias se mueren de hambre”, afirmó Yofra en diálogo con Tiempo Rural. Según el dirigente, la devaluación de diciembre de 2023 profundizó la recesión, mientras que “la transferencia de recursos hacia las grandes empresas energéticas y alimenticias golpeó aún más a los trabajadores”.

200 mil despidos y miles de empresas cerradas

Yofra destacó que las políticas oficiales ya provocaron más de 200 mil despidos y el cierre de 17 mil pymes. En ese contexto, recordó el caso de Dánica, que cesó operaciones debido a las decisiones económicas nacionales. “Este gobierno destruye empleos, sindicatos y el Estado. Cada vez que tocan un sector, lo cierran o lo rompen, dejando familias en la calle”, señaló.

También criticó la especulación de los agroexportadores con una nueva devaluación para el primer semestre de 2025, lo que calificó como “una muestra más del egoísmo empresarial”. “No les importa si la gente se muere de hambre, solo buscan ganancias”, sentenció.

Sobre la Hidrovía y la privatización

El líder aceitero cuestionó la intención del gobierno de privatizar por 30 años la Hidrovía, una vía estratégica para el comercio exterior. “Ni siquiera consultan a los trabajadores especializados en dragado y balizamiento. Esto demuestra la ignorancia y prepotencia del gobierno”, afirmó. Además, alertó sobre la pérdida de empleos que podrían derivarse de esa decisión: “Cada cambio que tocan deja familias en la calle. Tenemos que enfrentarlo porque esto no da para más”.

Salarios y lucha sindical

El gremio aceitero logró negociar una suma extraordinaria no remunerativa de $1.429.355, pero Yofra advirtió sobre la resistencia empresarial a garantizar salarios que cubran necesidades básicas. “Las empresas quieren que aceptemos migajas y eso no va a pasar. En un sector como la agroindustria, que genera el 25% de las divisas del país, no seremos la variable de ajuste”, aseguró.

Para el dirigente, la CGT ha demostrado pasividad frente al deterioro salarial, con un salario mínimo vital y móvil por debajo de los $300.000. “Es una irresponsabilidad de los dirigentes sindicales. Si no se actúa, esto terminará mal. Necesitamos un plan de lucha serio y unidad entre sectores para enfrentar a este gobierno manejado por empresarios”, concluyó.

Yofra insistió en que “todo conduce a que el movimiento obrero, con sus dirigentes al frente, salga a discutir políticas de mayor producción. Mientras sigamos exportando materia prima sin procesar, el negocio seguirá siendo de unos pocos”.